DIARIO DE UNA
GORDA DIVORCIADA / SOY UNA MUJER SIN CLASE
Hoy me levanté temprano. Me costó
conciliar el sueño después de lo de anoche.
Tenía demasiadas cosas en
qué pensar pero me rehusaba a hacerlo. Al final me quedé dormida imaginando
puras tonteras.
Después de la ducha me fui directo al
espejo. Ya no paso por la pesa. Seguro me dice lo que no quiero oír. Prefiero
ahora a mi amigo el espejo, el siempre me dice otra cosa, lo que me interesa.
Ahí estaba yo, desnuda observándome.
Mi piel sigue siendo suave, la gravedad aun no se ensaña con mis pechos ni mi
culo. Sigo manteniendo la cintura que
solía tener cuando era más joven. ¡Son estas caderas las "potentes"!.
¡Es mucho!
El sobrepeso se esconde ahí y en mi
vientre.
Decidido, comienzo de nuevo con la
natación.
Sonó el teléfono, era Johanna.
-Cuéntamelo todo, donde te metiste,
¡te buscamos por todas partes!
-Nada - le dije - No pasó nada, me fui
temprano.
-Eso no es lo que me contó Manuela -
me respondió curiosa
-¿Y qué vio Manuela? - le dije.
-¿En verdad quieres que te lo
recuerde?
-A ver pesada, qué quieres que te diga
-Te vieron con el nuevo, el petulante,
muy abrazadita. ¿No que te era totalmente antipático?
-Sí, y me sigue cayendo mal. No sé que
me pasó anoche amiga. Sólo sé que no volverá a ocurrir.
-Pero ¿¡cómo fue?!
-¡No se! No te digo. Ya, te dejo
porque tengo hambre y me voy a tomar un rico desayuno. Chau
-Ok, nos vemos el lunes
-Sí, ya el lunes. Chau.
¡Qué vergüenza!, eso es pasado mañana.
No sé que me pasó ayer, ni
siquiera quería pensar en ello. La llamada de esta loca me lo hizo recordar.
¡Ahhh!
Soy realista. Ese tipo de
hombres jamás se fijaría en mí. No cumplo con los cánones de belleza que a
ellos les interesa.
Sus mujeres son muy
delgadas, casi esqueléticas, todas son o se vuelven rubias, tienen la piel muy
blanca o demasiado quemada por el exceso de solárium y de cremas raras que se
echan encima. La mayoría tiene cara de asco, como si todo les causara
repugnancia.
No saludan a nadie, nunca
dan las gracias y nunca hay que esperar un "por favor" de parte de
ellas.
Hablo con conocimiento de
causa. Las esposas o novias o hermanas y madres de los gerentes de esta
"afamada" empresa son así. !Ninguna se salva!
Todas caminan como si
flotaran y que ojalá nadie las toque ni las mire. Luego, si se dignan a decir
algo, es como escucharlas hablar con una papa caliente en la boca. Que ganas de
gritarles ¡habla bien mierda!
El tal Bruno parece más
aterrizado. Más "como uno". Tiene una linda y amplia sonrisa. Aunque
igual se mandó un numerito en la disco.
Mmm. ¡Nadie salva!
Basta de pensar en hombres
que no valen la pena... ¡Además... tiene novia!
De sólo imaginar que él
puede hacerle sentir a ella lo que anoche me provocó sólo poniendo sus brazos
alrededor de mi cintura, me pone de mal humor.
Cierro los ojos y escribo.
No consigo olvidar esa emoción. No quiero hacerlo.
Ja!, De repente me acordé
de “pastel”. Él a veces me decía eso… que yo era una mujer sin clase. Que era
gusto de camioneros. Mmmm igual los hay bien lindos jejeje. ¡¡Qué me importa!! ¡Otro
imbécil!. Aghhh por qué tenía que acordarme de él.
Ya es tarde. El sol ya no
entibia mi balcón.
Me encanta mi apartamento.
Está cerquita del parque y fácilmente me puedo ir en bicicleta hasta la
oficina. ¡¡Eso!! Desde el lunes me voy en bici. Debo aprovechar que aún no
comienzan los fríos ni las lluvias y mi cuerpo necesita ejercitarse. A la vez
aprovecho de no pensar…. De repente me encuentro con un lindo camionero por el
camino jejejeje.
Ya me puse al día con todo. Ahora me quedo con ganas de más!!!
ResponderEliminarSandra, el lord esta en un impas obligado, pues estoy ahora con mucho lío, pero espero que la semana que viene vuelva ya para quedarse.
Besos
increiblee tus historias.. comence a leer una y no pare hasta acabarmelas todas :D seguire esperando por mas!! besos!!
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